lunes, 20 de julio de 2015

El Sistema Muscular.



Más de seiscientos músculos formados por miles de fibras conectadas responsables de los movimientos de nuestro cuerpo. Por cierto, ¿sabías que aunque movemos más músculos al sonreír que al enfadarnos, nos cuesta menor trabajo tener una sonrisa?

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La musculatura es un conjunto de músculos que se encuentra en el interior de nuestro cuerpo, y  estos son los motores del movimiento.
Un músculo es un haz de fibras musculares cuya propiedad más destacada es la contractilidad (pueden flexionarse y extenderse). Gracias a esta facultad el paquete de fibras musculares se contrae cuando recibe la orden del sistema nervioso. Al contraerse, se acorta y tira del hueso o de la estructura sujeta. Acabado el trabajo, recupera su posición de reposo.


Nuestro cuerpo tiene más de seiscientos músculos cuya misión es realizar movimientos: estirar una pierna, mover el párpado, cerrar una mano, etc.
Podemos clasificar los músculos en distintos tipos según dos categorías: por el control que tengamos de ellos o por dónde están en nuestro cuerpo.
Según el control que tenemos hay tres tipos de músculos:


·   Voluntarios: son aquellos que movemos cuando queremos y además mantienen unido el esqueleto. Son los de brazos, piernas, cuello... También se llaman músculos esqueléticos y tienen muchas formas y tamaños para permitirnos hacer todo tipo de tareas y movimientos

· Involuntarios:Son aquellos de los que no controlamos el movimiento, están en los órganos internos, como los del estómago, intestinos...

·  Cardíaco: El del corazón.

Por dónde están, podemos clasificar los músculos en:

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· Músculos de la cabeza.
Que son, entre otros: risorio, frontal, masetero y orbicular; todos se encuentran en la cara.
En la cabeza hay dos grandes grupos: los músculos masticadores, entre los que se incluyen los que elevan y bajan la mandíbula, y los músculos cutáneos, que están en contacto con la piel y son delgados, como en el cráneo, alrededor de los ojos y la boca y en la nariz.
Los músculos del rostro no se unen directamente a ningún hueso, como sucede en el resto del cuerpo, sino que están ligados entre sí, permitiéndonos una gran cantidad de movimientos pequeños para expresar distintas sensaciones, emociones y sentimientos, conocidos como "gestos". 
Los músculos del cuello -como el esternocleidomastoideo - y los de la parte superior de la espalda mueven y controlan la posición de la cabeza, la columna cervical. 

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Músculos del tronco.
El trapecio (se encuentran en el cuello), dorsales (se encuentran en la espalda), pectorales (se encuentran en el pecho), abdominales (se encuentran en el abdomen) e intercostales (se encuentran en las costillas). 
En la espalda o región dorsal del tronco están los músculos más potentes, que son los que corren a lo largo de la columna vertebral. Nos permiten ponernos de pie y permanecer erguidos mientras estamos sentados. Además, aportan la fuerza necesaria para levantar y empujar objetos. Destacan el trapecio, que eleva los hombros y mantiene la verticalidad de la cabeza, y los grandes dorsales, que llegan hasta los glúteos y permiten mover los brazos hacia atrás. 
Por delante se encuentran los pectorales, que nos permiten mover los brazos hacia adelante, y los intercostales -situados entre las costillas-, que participan activamente en los movimientos respiratorios. Debajo de la caja torácica están los rectos mayores del estómago, también conocidos como músculos abdominales.

· Músculos de la extremidad superior, que son: deltoides, bíceps, tríceps, extensores y flexores. Los pronadores y supinadores hacen girar la muñeca y la mano.

· Músculos de la extremidad inferior, que son: glúteos, bíceps, cuádriceps, gemelos, extensores y flexores.
En las piernas o extremidades inferiores encontramos el cuádriceps y el sartorio, que permite cruzar una pierna sobre la otra.
En la parte posterior de la pierna, están el bíceps, que dobla la pierna por la rodilla, y los gemelos, ubicados en las pantorrillas, que entre otras cosas, nos permiten ponernos en puntillas.

Además están los extensores y flexores, que nos permiten abrir y cerrar la mano o mover el pie. 

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