Remedios caseros para los mareos.

Mareos

Los mareos se caracterizan por producir una sensación de inestabilidad que puede tener su origen en problemas físicos o psicológicos que podrán determinarse analizando la sintomatología complementaria y mediante pruebas clínicas puntuales.

En otras ocasiones los mareos obedecen a un estado de fatiga transitorio originado por un sobre esfuerzo o trabajo extenuante prolongado en el tiempo y remiten espontáneamente tras un tiempo de reposo.

Causas y tratamientos de los mareos

Fatiga, la fatiga mental o física puede causar extenuación que se manifieste en forma de mareos y que pueden estar ocasionados por realizar una actividad demasiado pesada como levantar peso o correr durante un tiempo superior al que permiten las facultades físicas de la persona.

La fatiga mental aunque en menor medida también puede inducir mareos cuando se ejercita la mente durante mucho tiempo sin descanso como por ejemplo estudiar para un examen durante horas.

Estos mareos pueden producirse durante la actividad o una vez finalizada la misma, cuando el organismo retorna al estado normal de reposo y comienza a acusar los síntomas del sobre esfuerzo.

En estos casos no es preciso realizar ningún tratamiento porque suele remitir espontáneamente mediante el descanso y la reposición de líquidos en el caso de que se trate de fatiga física derivada de una intensa actividad.

Algunos medicamentos o drogas pueden inducir mareos en quienes los consumen y en esos casos de debe identificar la sustancia que la produce para cambiar el tratamiento previa consulta al especialista.

Los problemas de tensión también son causa recurrente en los mareos, tanto la tensión alta (hipertensión) como la baja (hipotensión) suelen producir estas sensaciones cuando la frecuencia cardíaca se descompensa.

Otros problemas cardiovasculares como las arritmias incluyen los mareos entre su cuadro sintomático habitual agravando aún más el estado de alteración general que padecen estos pacientes.

Problemas en el oído interno producen también un mareo muy característico que se conoce como vértigo. Esto se debe a a la obstrucción de los conductos del oído que regulan el equilibrio produciendo un desajuste en el movimiento.

Las personas que sufren de vértigo perciben que la habitación donde se encuentran se mueve a su alrededor de forma similar a como sucede en estados de embriaguez, pero estas sensaciones se minimizan o no suelen producirse en espacios abiertos o bien iluminados, por lo que una forma de aliviar este molesto síntoma es trasladarse de habitación, abrir las ventanas o encender las luces.

El vértigo postural es otro tipo de vértigo que afecta a las personas con malformaciones de columna (especialmente en las dorsales) cuando la desviación evita el correcto paso del flujo sanguíneo de la cabeza al resto del cuerpo y viceversa.

La subida o bajada de azúcar en la sangre es otra causa recurrente de mareos convencionales, especialmente en los diabéticos que se encuentran sometidos a constantes cambios bruscos de los niveles de glucosa en cuanto no se toman la medicación.

Trastornos psicológicos como la ansiedad o los ataques de pánico pueden producir mareos durante los brotes por el estado de nerviosismo generalizado que somete a la persona a un alto grado de estrés mientras que estos se producen.

Enfermedades que predispongan a la deshidratación como gastroenteritis, diarreas etc también pueden provocar mareos como consecuencia del desequilibrio electrolítico.

Hemorragias internas producen mareos en sus etapas iniciales ante la pérdida de flujo sanguíneo y pueden presentarse convulsiones si no se recibe asistencia inmediata.

Remedios caseros para los mareos

Los remedios caseros para los mareos, son algo muy común y también de los más buscados en Internet, citamos algunos remedios que pueden ayudar a aliviar o quitar este malestar en algunos casos.

1. Comer chocolate

El dulce, principalmente los chocolates, son ideales cuando tenemos un mareo, nos ayudarán a recuperar los azúcares que se han perdido. Tampoco, éste debe ser tomado en exceso.

2. Zumo de manzana

Las propiedades de la manzana son muchas, entre una de ellas está que puede ayudarnos a quitar un mareo repentino. Se necesita tomar 100 mililitros de zumo de manzana para después recostarnos. Si durante el día sientes el mareo, se sigue tomando el zumo hasta que ya no se sienta este malestar.

3. Menta con azúcar

Cuando empecemos a sentir un mareo, deberemos cortar algunas hojas de menta y combinarlas con azúcar. Una vez que están combinadas, la empezaremos a comer y el mareo debe quitarse en un lapso de unos 5 minutos.

4. Jengibre

Principalmente se utiliza en mareos producidos en el viaje. En muchas culturas se ha usado este remedio casero. Toma una infusión al día (una taza de agua con una cucharada pequeña de la planta seca).

5. Frío y calor

Si los mareos son producidos por la cervicales, es bueno realizar tratamientos de frío y calor en la zona. Ponte durante 3 o 4 minutos una bolsa de hielo y luego realizas una ducha con agua caliente o aplicas una bolsa de agua caliente.

Recomendaciones y consejos para el tratamiento de los mareos

1. Evitar los cambios bruscos de posición o de postura es fundamental para las personas que padecen vértigo, pues el oído interno de estas personas no funciona adecuadamente y debe adaptarse progresivamente a los cambios posturales para que no se descompensen los líquidos de los canales semicirculares.

2. En los mareos que se intuya un posible desvanecimiento es de vital importancia que la persona se tumbe en el suelo antes de perder la consciencia independientemente de donde esté, pues podría golpearse la cabeza al caer y lesionarse.

3. Levantar las piernas hacia arriba y respirar pausadamente puede resultar de ayuda mientras llegan los servicios médicos si la persona todavía está consciente.

4. Tomar un caramelo o llevar siempre uno en el bolsillo puede ser un remedio eficaz ante una inesperada bajada de azúcar.